24 de enero de 2006

México

Pamplona-Madrid-México D.F.


Bueno, amanezco por fin al otro lado del charco... y nada mal de verdad, tras la maratoniana jornada formada por ayer y antesdeayer mas las siete horas que llevo ganadas...
El Domingo fue largo y tras las despedidas emprendí por fin el vuelo... llegué a D.F. ayer por la mañana y tras una hora de metro me reuní con Mónica para ir a casa de Argelia (nuestra anfitriona) y con el trío calavera (o los txalapartaris compulsivos), Uff! qué satisfacción da dejar la mochila y una ducha refrescante... a pesar del cansancio, me quedaron fuerzas para visitar el campus universitario y empezar a degustar la gastronomía mexicana. Hicimos una comida corrida, que viene a ser como un menú del día pero eso sí... enchilado!!!
La cuidad más grande del mundo aparece cubierta por una gran nube de polución y gases, siendo esto lo peor ya que al contrario de lo que me habían contado y a pesar de vivir en un barrio con mala reputación no he percibido tensión, ni manifestaciones violentas, ni hostilidades. El metro esta limpio y por las calles la gente y los mercadillos multicolor dan vida a una urbe espectacular a descubrir. La primera impresión me recordó a las ciudades de Brasil.

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