NicaraguaOmetepe
Bordeando el Lago Nicaragua por su margen occidental se llega a Rivas y a escasos 5 km. está San Jorge, localidad desde donde se agarra el ferry para llegar a la impresionante Isla de Ometepe, que, teniendo en cuenta el tamaño de Nicaragua, es paradójicamente la isla de agua dulce más grande del mundo... y no contenta con eso además posee dos volcanes uno de ellos el Concepción todavía activo de 1.600m sobre el nivel del mar (1.400 sobre el lago), que de vez en cuando se le escapa algún pedico creando incertidumbre en la población... Nicaragua tiene alrededor de 20 volcanes la mitad de ellos todavía en activo; Me dirigí junto con Jonás, un amigo de aventuras, hacia el extremo sur de la isla donde está situada la Finca Magdalena puerta de acceso al volcán Madera y uno de las últimos retoños de la revolución sandinista donde a modo de cooperativa familiar se cultivan distintos tipos
de flores, café orgánico, bananos, etc,... Mi intención era la de trabajo a cambio cama y gallopinto, pero al final por una cosa o por otra no pudo ser, y es que hubo algún rollo un poco féo que os voy a intentar resumir... La segunda tarde de estar aquí esperando a que nos dijeran donde currar, a Jonás y a mí nos robaron las cámaras de fotos del cuarto, que bajón, teniendo en cuenta que tenía las fotos desde Honduras hasta aquí... y tras hablar con los compas y no llegar a nada más que a una frustración muy grande, intento dormir aún memorizando las 200 fotografías en mi cabeza. Por la mañana y tras tener un presentimiento de recuperar la cámara decido hacer un poco de presión y hablo con la junta, ya que estaba un poco decepcionado con ellos por no habernos dado curro, por tener los precios en dólares, ser un poco careros, etc,... entró una señora diciendo que un turista chino se iba y que si yo quería por si acaso hablar con él, ya que todavía nadie había salido del lugar... el hombre se quería ir y yo intenté explicarle lo que había pasado y que si no le importaba esperar mientras se solucionaba, él me respondió
que también le habían robado la cámara en Granada y que se quería olvidar de todo e irse de este país... entonces fué cuando entre respuestas y evasivas sin sentido trató de irse a toda costa y como estábamos en la puerta él salió por la de atrás... así se delató, yo lo seguí por el camino hacia el pueblo (1.5km) con bastante temor, ya que a parte de chino-japonés era fuerte... de camino y mientras los compas fueron en moto a avisar a la policía yo conseguí convencerle de que era mejor solucionarlo conmigo y no con la policía... bueno, al final el hombre lo reconoció, se puso a llorar pidiéndome perdón y claro, desde ese mismo momento (y con las cámaras en la mano...yuuujuuu!) me dió tanta lástima que tuve que ayudarlo a salir del gran problema en el que se había metido y es que aquí te comes unos cuantos años por esto... lo hice seguido por el impulso de saber que no era un mal tipo, realmente a él le robaron su cámara en Granada, y aunque eso no justifica que robes, tampoco se llevó el dinero que tenía Jonás junto a la cámara y lo dejó encima de la cama... no era mal tipo, simplemente fué estúpido... pues nada, escondí las cámaras en el camino y lo acompañé al pueblo donde el hombre me preguntaba por qué lo ayudaba, y se sintió un poco mal... la verdad es que estaba cagado en los pantalones..., me llegó hasta a cantar una c
anción de agradecimiento en japonés que sonaba como la banda sonora de Candy Candy... a la media hora llegó la policía y lo registraron de arriba a abajo sin encontrar nada claro, entonces subieron al hostal, me despedí del chino, subí a toda leche y cuando llegué estaban empezando a registrar la gente y les dije que no me parecía bién y que lo dejaran... claro la policía feliz por no tener que trabajar pero también mosqueada, por que para eso no se les molesta... después de irse, ahi me ví yo sorteando las preguntas de compas y demás huéspedes encubriendo al ladrón de mi propia cámara... por la noche y dándole tiempo al ladrón de guante acascabelado a salir de la isla, se lo cuento a los compas y me libero de tan rara y pesada carga de tener que estar ocultando la verdad cuando todo era tan evidente...buf, buf, la verdad es que nunca me había visto en una situación tan estrambótica, muchas emociones en una sóla mañana...
Al día siguiente y con la satisfacción de haber obrado bién (y con la cámara en la mochila) subimos al volcán Madera (1.394m), es un trekking bastante fuerte, ya que aparte del desnivel, hay otros factores que dificultan la subida, como la nube permanente que hay desde los 600 metros y que con su humedad forma un barro bién difícil... el camino es precioso, el fresco y húmedo olor de la selva te entra en los pulmones dándote más fuerza que la normal, la vegetación es sorprentende, al inicio mariposas "morpho" (esas gigantes azules) nos daban la bienvenida con su alegre voleteo, los monos (una vez más) trataban de intimidar con sus terribles gritos,
también de camino se encuentran "petroglíficos" unas piedras grandotas con unas marcas indígenas, y al final con todos estos alicientes hace que las cuatro horas y media de subida se conviertan en un ligero paseillo....(já!). Lo más bonito estaba por llegar, y es que hace miles de años, después de apagarse el volcán, se formó una laguna en lo que era el interior del cráter... sencillamente espectacular... En el medio de la laguna se siente algo muy especial, y es que aparte de meter las piernas hasta la rodillas en el fango del fondo, sientes cómo el agua rodéa al lodo, la selva al agua, el cráter a la selva, luego la selva otra vez, luego el Lago Nicaragua, luego Nicaragua, después los océanos, etc, etc, etc,... situándote en el epicentro de una diana con aros naturales circundantes... aquí si que sinceramente, y sin mirarse uno al ombligo, te sientes como en el centro de la tierra...
Los últimos días en la isla fueron para visitar la capital Moyogalpa, me alojé en el hostal Central donde tienen a "Bambi" por mascota... una tarde les bacilé a unos niños haciéndoles los típicos trucos de magia y al día siguiente hubo hasta corro (y no sólo de críos...) para ver al Copperfield de pacotilla haciendo desaparecer sus dedos o sacándose la taba de la nariz... pasen y vean...
Ometepe es una isla sorprendente, ver las vacas beber en la playa mientras las olas rompen en su morro, los atardeceres de Moyogalpa son como verlos en el Pacífico pero en la linea del horizonte se aprecia el perfil de la tierra firme, los inmensos volcanes se ven donde quiera que estés, la sencillez de los isleños, el pescaito frito... Hay una canción de Mejia-Godoy que dice "Ometepe tierra prometida, Ometepe oasis de paz", y es que aquí apenas se sufrió los graves daños sufridos por la guerra en el país y da esa sensación de estar en un pacífico oasis ciertamente...
Tras abandonar la isla no sin mucha pena pasé los primeros días de la Semana Santa en San Juan del Sur, un lugar turístico en la costa del Pacífico y salí del país por la frontera de Peñas Blancas.
Después de atravesar México, Guatemala, Honduras y Nicaragua llegar a Costa Rica es como cuando compras un televisor nuevo, las cosas se ven diferente... Uno ya no sabe si es cosa del brillo, del contraste o del color, pero se nota la diferencia; Y esto no quiere decir que séa a mejor, obviamente Costa Rica es un país más limpio, más desarrollado y más rico que los anteriores, por algo la llaman la "Suiza" de centroamérica, pero también todo este progreso y diferencia con los paises vecinos y la influencia gringo-européa en la sociedad, crean un cierto recelo marcando una gran diferencia entre los "ticos" y el resto de los centroamericanos... Sinceramente mi opinión es bastante subjetiva, hablo más por las experiencias que me han contado que por las mías propias, ya que, mi estancia en el país se reduce a 
6 días, y en este tiempo no da para sacar grandes conclusiones; Tras pasar la noche en la inhospita capital, pienso que todo el mundo salió de vacaciones por la Semana Santa y sólamente se quedaron los bandidos, y disponiendo de tan poco tiempo decidí visitar tan sólo un lugar y eso es algo bueno que tiene Costa Rica, te puedes ir en cuatro horas desde la capital al caribe o al pacífico, y finalmente opté por el caribe ya que sólamente conocí Utila en Honduras.
es francamente espectacular, todo se ve limpio, no hay esa ristra de basura en los márgenes de la carretera y los ríos aparecen hermosos y limpios, el paisaje es precioso... Pasando por Limón famosa ciudad del caribe llego a Puerto Viejo destino final en el que pasaré mis últimos días en centroamérica; El pueblo es superturístico, pero muy agradable, ya que una vez más respiro el ambiente caribeño, la cultura rastafari está presente en cada esquina con todo lo que esto conlleva, la mota, el reggae, la no-prisa, etc,... Las playas son enormes, puedes caminar kilómetros sin cruzarte con nadie, la arena fina, aguas turquesa, palmeritas,... como para hacer un poster de Bacardí... En la comida se aprecia 
también el toque criollo con sus alegres salsas y especias... La verdad es que el tiempo pasó rapidito y tras el sosiego caribeño me enfrenté al duro reto de tener que pasar dos días de viaje para llegar a Lima en Perú, después de tener que pasar la noche en el aeropuerto, volar vía Miami y tener que desembarcar mi maleta obligatoriamente y tener que volverla a facturar, pasar descalzo por los detectores, rellenar formularios estúpidos yankees con preguntas como si mi abuelo fué algún militar nazi, si tengo permiso de armas, etc,... para tan sólo estar 5 horas en el país... en fin.
estando abierto a todo tipo de experiencias, con la ventaja que muchos extranjeros no tienen que es la de poder hablar el mismo idioma, y es que aquí cualquier momento es bueno para conversar y poder acercarte más a la gente, conocer sus inquietudes, su opinión y en definitiva conocernos mejor...
